martes, 16 de febrero de 2016

Camilo

Camilo

Hoy se están celebrando 50 años de la muerte de Camilo Torres Restrepo, hijo de una acomodada familia bogotana, sacerdote querido y sociólogo recordado en la Universidad Nacional, cura guerrillero en la memoria de mucha gente y terrorista últimamente, sorprende que no se le haya aplicado la frase de moda “vándalo o mamerto”. Tras 50 años es imposible intentar eludir la oleada de sentimientos que despierta Camilo en la sociedad colombiana, un bombardeo permanente de opiniones, aseveraciones e incluso juicios que son lanzados por sus creadores con el fin de establecerlos como verdaderos, justos e innegables por los siglos de los siglos, amen.

Hay que partir primero del desconocimiento histórico, cosa habitual en Colombia, que se genera en torno a la figura de Camilo, la ventaja de pretender dar un discurso sin tener conocimiento del tema es que se puede decir lo que se quiera mientras el receptor sea aún más ignorante, lo cual en Colombia no es una dificultad en lo que a historia se refiere, si bien el contexto y la experiencia de vida de una persona no justifica, si explica, es ingenuo tratar de analizar la figura de Camilo desde una perspectiva actual, se incurre en un  gran error rebajándolo a un simple guerrillero belicista dedicado a la muerte y destrucción sin más sentido que seguir ordenes de un superior por lo general en la misma situación, Camilo en cierta manera es la encarnación de un sentimiento manifiesto en la época y que sobrevive hasta día de hoy, impotencia, corrupción, desigualdad desbordada, etc. Sentimientos que en la época de Camilo igual que hoy se pueden palpar en la sociedad, el triunfo de la revolución Cubana, la muerte de Gaitán, la dificultad de ser de izquierdas en la época, todo ello y muchos factores más que se me escapan, en el manifiesto que hace Camilo ya como miembro raso del ELN -no como líder o cabecilla de la organización como se ha dicho estos días- expresa su inconformidad y decepción por la estructura política de la época y entiende claramente que dadas las características del sistema era imposible que el pueblo se hiciese con el poder.


Para algunos fue sin duda la peor decisión de Camilo, para otros estuvo justificada, en mi opinión la lucha armada ha perdido a través de los años importancia y legitimidad, la toma del poder por medio de la violencia resulto ser un fracaso, sin embargo hoy no se celebra al cura guerrillero, sus 40 días como guerrillero no son motivo para deslegitimar una figura tan importante para la historia colombiana, la demostración de que la educación es el único camino significativo, ser por generaciones un figura a seguir no por ser el cura guerrillero si no por ser el cura Camilo que logro reunir a grandes sectores del país en torno a un solo objetivo, la justicia social, la profunda sensibilidad social y la valentía de morir por sus ideas, es esto lo que se celebra hoy, es a ese Camilo al que la Universidad Nacional ha decidido celebrar, no es una apología al terror, no es hacer eco a la violencia, no es celebrar al ELN es darle a una figura su sitio en la historia.

Presentación

Hola a todos quienes amablemente quieran leerme, soy estudiante de economía de la Universidad Nacional, desde siempre me ha interesado el tema social, lo cual fue mas un error en mis años tempranos, es difícil abordar un tema tan complicado sin el conocimiento suficiente, esto siempre nos lleva a creencias erróneas, visiones equivocadas y mas importante todavía a lucir como ignorantes, afortunadamente crecí en un hogar donde el conocimiento siempre fue lo mas importante, desde entonces aprendí que de nada sirven las buenas intenciones sin teoría que las sustente.

El objetivo de este blog es escribir mis pensamientos y someterlos al escrutinio público, no pretendo solucionar nada, solo quiero escribir mis opiniones y confrontarlas con otras personas siempre desde el respeto y la buena actitud, mi opinión no es ni la verdad universal ni pretendo que lo sea y tampoco quiero que la gente se lo tome así.

Esta idea surge  porque tras años de escribir mis cosas en cuadernos y con un poco de conocimiento mas que cuando era un niño, me di cuenta que guardadas en un cajón sirven de poco, quiero que la gente pueda ver y corregir.